Venezuela plantea cumbre presidencial OPEP para defender precios del petróleo

Caracas, 14 de septiembre de 2015 (MPPRE).- En el acto conmemorativo del 55° aniversario de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro Moros, señaló que varios países miembros de la organización y no miembros coinciden en que la OPEP debe adaptarse a la nueva realidad de los mercados petroleros.

«La OPEP posee una nueva realidad y frente a esa nueva realidad debe existir una nueva política petrolera, frente a la inestabilidad de los mercados y de los precios, que afectan gravemente la economía, las inversiones que deben garantizar el desarrollo energético de nuestro mundo en los próximos años y hacen inviable el funcionamiento de nuestros países y los grandes exportadores del mundo».

Expresó a los presentes su absoluta convicción con respecto a que «llegó el momento que la OPEP convoque una cumbre de Jefes de Estado de países socios de la OPEP y que se convierta en un motor para la construcción de una nueva alianza para la estabilidad, la defensa del mercado y la defensa de los precios petroleros, debe ser un poderoso motor, tenemos la experiencia, la capacidad, la estructura técnica para lograrlo».

Asimismo, el Mandatario Nacional sentenció que los países miembros y no miembros de la OPEP deben ser capaces de mandar un mensaje claro «porque los Estados deben y pueden marcar el rumbo de los mercados, todos sabemos que no es viable invertir a largo plazo con un barril a 40 dólares».

Anunció que la República Bolivariana de Venezuela ya tiene un conjunto de propuestas, referente a la ruptura de los ciclos del mercado, para ser planteadas y evaluadas en la cumbre que «debe hacerse entre los Jefes de Estados de la OPEP, y ser convocada a la brevedad posible».

Con motivo de los 55 años del organismo, Nicolás Maduro expuso que Venezuela proponía «colocar un precio base, un piso que vamos a compartir con el equipo técnico de la OPEP, otra es el control de la producción y la reducción necesaria para buscar un equilibrio e ir programando progresivamente el crecimiento de la producción. Nada de esto perjudicara a los países miembros y no miembros de la OPEP, todo lo contrario creará condiciones para un mercado estable, fluido, con inversiones garantizadas».

De igual forma resaltó la necesidad de activar las relaciones bilaterales entre los países productores para «diversificar la economía de forma integral, para la diversificación productiva, tecnológica y el apuntalamiento productivo para el fortalecimiento de nuestros países. Hemos vivido por un siglo en el modelo petrolero, con sus ventajas y sus males, y desde hace más de una década nuestros países están en busca de eso, es mucho los que podemos aportarnos entre nosotros mismos para lograrlo».