Indonesia, 25 de abril de 2015.- Venezuela como país observador en la Conferencia Asia África, elevó una vez más su voz desde la República de Indonesia, con la participación del vicepresidente Jorge Arreaza, en las plenarias programadas para la jornada de trabajo, donde resaltó que hoy día, los pueblos del mundo están frente a un desafío mayor.
Arreaza expresó que «no se trata simplemente de no estar alineados con una potencia y su ámbito de influencia, hoy el desafío el mucho mayor, es más difuso, se trata de no estar alineados con la injusticia, de no estar alineados y combatir las guerras, el irrespeto al Derecho Internacional Público y combatir contra el neocolonialismo en cualquier modalidad, combatir contra el hambre, no estar alineados por la discriminación ni con la dominación en cualquiera de sus formas».
En este sentido el vicepresidente envió un mensaje de unión, abogando a la justicia, a la igualdad, tras realizar planteamientos importantes dirigidos a ofrecer mayor bienestar a los pueblos, no solo de Latinoamérica, sino del mundo.
Detalló los referidos temas que podrían formar parte de la agenda en el encuentro de los Países No Alineados, a realizarse desde el 27 de septiembre hasta el 2 de octubre en la isla de Margarita, Venezuela.
«La reforma y la democratización de las Naciones Unidas, el rechazo a la violación del Derecho Nacional Público con el uso unilateral de la fuerza, la necesidad de transformar la arquitectura del anacrónico sistema financiero internacional que nada resuelve a favor de los pueblos, el rechazo a la concentración de la riqueza en pocas manos, mientras la pobreza se expande en muchas manos».
El vicemandatario se refirió al papel fundamental que juega la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), la cual mantiene una significativa unificación desde México, pasando por Centro América y el Caribe y toda Suramérica, por lo cual consideró importante su incorporación a los tres grandes bloques desde el mundo que son, Asia-África, América Latina y el Caribe. «Tenemos la responsabilidad y en nosotros reposa la mayor reserva, no sólo de recursos naturales, de población, de energía, sino también la mayor reserva moral y ética que existe en el mundo».
Recordó las palabras del Comandante Ché Guevara en la Cumbre de Asia y África en 1965 desde Argelia, «hablando de los peligros del colonialismo, del neocolonialismo, del imperialismo, nos decía que frente a ellos, los países y los pueblos, conscientes de sus deberes, peligros que entraña esta situación de los sacrificios económicos y el político, que nunca pueden marchar separados y formar entonces un gran bloque, un pacto que a su vez ayude a nuevos países a liberarse, no solo del poder político, sino también del poder económico imperialista».
Al respecto, reconoció que el Comandante Hugo Chávez creyó firmemente en la cooperación Sur-Sur. «Durante los años que estuvo al frente de la Revolución Bolivariana y del pueblo de Venezuela no hizo más que dedicarse y hasta entregar su vida para garantizar la unión entre nuestros pueblos».
Al mismo tiempo, celebró que hoy le corresponda a Venezuela formar parte de un momento histórico de los 60 años de la génesis del Movimiento de Países No Alineados.
«Es una invitación gentil, pero además estratégica, el presidente Nicolás Maduro, de Venezuela, les manda su saludo, su abrazo y esperamos ver a los Jefes de Estados del Movimiento de Países No Alineados, en una hermosa isla al norte de Venezuela, Margarita, para que compartan con nosotros esa cumbre que esperemos que profundice aún más este momento histórico de los Países No Alineados».
Unidos por la igualdad
Arreaza reiteró que existe una intensa lucha a favor de la soberanía y el respeto a los pueblos, acotando que el final de la Guerra Fría, «no significó el fin de la historia como muchos predijeron, como tampoco significó el fin del Movimiento de Países No Alineados. Se trató de imponer, se ha tratado de imponer un sistema unipolar, unilateral, mucho más peligroso incluso que el propio sistema ya amenazante de la Guerra Fría. Aquí estamos después de la Guerra Fría combatiendo el unilateralismo, promoviendo el multilateralismo, juntos en esta cumbre África, Asia y América Latina».
Se trata de una lucha histórica impulsada por los Comandantes Ché Guevara, Hugo Chávez y Fidel Castro, quienes «advirtieron y advierte el Comandante Fidel todavía, sobre las características del neocolonialismo, de la colonialidad como muchos pensadores suramericanos han expresado, es una mutación del colonialismo y del imperialismo, sutil pero perversa porque utiliza los monopolios del capital, el sistema financiero internacional para continuar dominando a los pueblos, tal como lo hacía el colonialismo anteriormente».
Ante esta reflexión, citó como ejemplo a Palestina donde es tiempo de que se formalice y de que exista el Estado libre de Palestina «y que todos podamos compartir con el pueblo de Palestina esta buena noticia».
Basado en los diez principios de Bandug, los cuales consideró como mandamientos, el vicepresidente de Venezuela insistió en la necesidad de ver hacia el futuro, hacia la libertad de los pueblos, «debemos derrotar siempre, cualquier modalidad de colonialismo, de neocolonialismo, de imperialismo unilateral y monopólico, justicia, solamente la justicia es el camino que garantiza la paz».
A su juicio, la alianza entre Asia, África y América Latina no solo es necesaria, sino indispensable. «desde el sur, nosotros determinaremos el futuro en libertad de los pueblos del mundo, desde el sur, con los pueblos del sur, por los pueblos del sur y para los pueblos del sur y de todo el mundo, nosotros tenemos que unirnos más que nunca».
La cumbre Asia-África está conformada por 106 países de los cuales 54 pertenecen al continente asiático y 52 al africano. Venezuela fue invitada a este encuentro como país observador y único representante de Latinoamérica.
La visita permitió que el vicepresidente Jorge Arreaza también se reuniera con su homólogo indonesio, Jusuf Kalla, a quien agradeció en nombre de Venezuela, la invitación a participar en la Conferencia Asia-África.